jueves, 25 de julio de 2013

voca

Algo que evoque,
ventana a olvidado paisaje
donde el valor es moneda
y la usura dolor con fealdad.
Puerta en laberinto,
barrera a Minotauro
frontera contra el mal.
Amor con estrambote,
cuando nadie imagina
que dribla el conformismo
y juega a las batallas
sin necesidad de ganar.
"Contad si son catorce".
El cuento de nunca acabar.
altares

11 comentarios:

  1. Uno, dos, tres, cuatro... diez, once... catorce
    Por favor, vuelve a empezar

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  2. ¿Otro soneto sin rima ni compás?
    Todos los necesarios escritos serán
    y hasta incluso alguno más.
    Hay un ángel que sopla
    utilizando los dedos sobre el teclado
    como pilares de catedral,
    para que los abrace en remolinos
    el futuro más deseado
    por el destino.

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  3. Solo poner orden
    ordenar el conformismo,
    que hace del olvido
    paisaje en laberinto
    del nunca acabar.
    Si nunca se acaba...
    ¿ Para que empezar ?

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  4. Para buscar otra vez
    los versos perdidos
    por un fallo del sistema.

    Relajación.

    Para vivir el instante

    Oleremos la nieve
    la ola contra la roca,
    todas las flores
    en laberíntico jardín
    sin minotauros escondidos
    y el despertar.
    El dormir juntos
    bajo sábanas distintas
    mientras se perfuma el aire
    en mundos distantes
    con la misma felicidad.

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  5. one... two... three... four...



    sopla...

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    1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    3. De barro era, hasta que Dios sopló.
      Entonces tuvo espíritu inmortal.
      Era barro, pero ya no era igual.
      Fue carbono que ser diamante soñó
      y esperaba el leve aliento de Dios
      para moverse de grafito mineral
      a invencible luz con su natural
      colorido en la dispersión.

      ¡Cuanta milonga!


      En tu oído el soplo, el aliento,
      para meterte dentro
      mi respiración.
      Salivarte el lóbulo,
      en el arte de mojar
      volviendo el barro luminoso
      y la luz material.
      En una historia distinta
      con un distinto empezar,
      diferente conseguir,
      y ser, llegar a ser.

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    4. cuatro:
      los comentarios eliminados eran el mismo, pero sin espació entre la exclamación y la segunda parte. Lo cual podía dar pie a interpretar que la milonga era la segunda parte y no la primera. He creído necesaria la aclaración, para no dejar esos comentarios eliminados como parte de un arrepentimiento.
      De corazón siento, que no lo necesitabas.
      Por otro lado, dos fallaron, pero los otros dos se plasmaron. Suman cuatro.

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    5. cuatro hilos rojos que nos unen en la distancia

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    6. Hay almas gemelas y ovillos de lana virgen

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